Los próximos domingos 23 y 30 de marzo se celebraran en Francia las dos vueltas de las elecciones municipales.
Desde la página de Internet “Ana-Muslim” se está llevando a cabo una campaña bajo el lema de «Preserva tu fe», para evitar que los musulmanes voten, pues consideran que tanto el sistema democrático como la participación en procesos electorales son contrarios a la ley islámica o sharia.
Página web Ana Muslim
Hashtag en Facebook: #préserve_ta_foi_ne_vote_pas
Una de las imágenes promocionales de la campaña en la que identifica a todos los partidos políticos como «taghout», definido por los salafistas como: «todo lo que se extralimita, ya sea a quien se adora, se sigue, o se obedece. Por lo que todo pueblo que juzga con otras leyes que las dictadas por Allah y enseñadas por su Profeta, es un tagut o taghout».
Contenidos:
¡¡Finalmente campaña anti-voto: semana de movilización y acción para todos!!
Para todos aquellos que no pongan en peligro, no negocien, no vendan, ni distorsionen la realidad del Tawhid (unicidad de Allah).
Para todos aquellos que han comprendido la trampa de las elecciones, sus manipulaciones y mentiras.
Para aquellos que también quieren traer una vía diferente y única: La desaprobación, la resistencia y la abstención activa en esta campaña.
Te ofrecemos la oportunidad de hacer campaña, fi sabillilah, descargando los folletos o el cartel con consejos para ayudaros en vuestro trabajo de campo.
¡Solicitamos una difusión masiva! ¡Esto no es más que el principio, inshaa Allah!
Página de Facebook
Hermanos, hermanas, no votéis:
Al igual que en todas las elecciones en Francia y en otros lugares, os invitamos a todos a no votar.
Por 3 razones:
1) Los fundamentos filosóficos del sistema político francés, en este caso la democracia, son incompatibles con los principios fundamentales del Islam, y este es el elemento más esencial.
La democracia es una forma de idolatría, la incredulidad que excluye al Islam para que acepte su esencia.
La democracia proclama la soberanía y el poder de tomar la ley en la comunidad de las personas.
Todo musulmán sabe que la adhesión al Islam es reconocer a Allah como el único Señor es El que dice lo que es legal, lícito e ilícito, cosa que es ilegal para cualquier grupo humano.
En una democracia, el Parlamento promulga leyes en representación del pueblo, que deben respetarse o no sobre la base de la razón humana.
En el Islam, todo sistema de este tipo es considerado kafir (infiel) y el ídolo adorado que no sea el Creador (taghout).
Allah gobierna sobre todas las cosas, todo el universo y por lo tanto toda la sociedad, su autoridad se expresa a través de la creación de instituciones que sigan el Corán y la Sunnah. Esta es la ley del juez Allah entre nosotros y debe regular nuestra relación a pesar de que somos una minoría en una sociedad no musulmana.
2) Incluso si no había contradicción entre los fundamentos del Din y la democracia, sabemos que el sistema democrático está profundamente equivocado, es injusto, malo, racista, mentiroso… ¿Cómo puede un musulmán que teme a su Señor participar en este sistema, vivir bajo sus condiciones y ser cómplice de sus fechorías.
Todos estamos convencidos de que las personas que nos gobiernan son perfectos sinvergüenzas sin escrúpulos. ¿Por qué se meten con el Islam diciendo que acepta este sistema?
¡Algunos replican que tal vez no todo es malo en una democracia!
Allah habla de alcohol en el Corán y nos dice que contiene cosas positivas pero sus cosas negativas son mayores. Así que no es suficiente, en teoría, ser capaz de elegir a sus líderes, les pedimos su consideración y que no nos torturen para validar un sistema. Hay varios sistemas que contienen principios sólidos PERO el Islam contiene toda la sabiduría y todo el bien.
¿Por qué defender y conformarse con un sistema que contiene un 10% de cosas positivas cuando se puede tener otro que contiene el 100 %. No debemos escoger entre el mal y el mal menor, sino entre el bien y el mal.
Imagen del folleto publicitario
3) Excluyendo los dos puntos mencionados anteriormente, desde un punto de vista puramente estratégico, utilizan el sistema opresivo democrático para infiltrarse y defender nuestros derechos es las cosas más estúpidas. La comunidad musulmana es numéricamente insignificante, representa menos del 5 % de la población, la mitad de este 5% no vota, esta comunidad está dividida y no tiene el liderazgo para poder «votar con inteligencia» en la misma dirección.
Preguntaos una última cosa: ¿El Mensajero de Allah (aleihi wa salam salat) habría sido un demócrata? ¿Habría participado en elecciones o habría llamado a la gente a adorar a Allah y vivir de acuerdo con Sus enseñanzas? ¿Habría respondido a la convocatoria electoral? o habría dicho: «Aunque pusieran el sol en mi mano derecha y la luna en mi mano izquierda, no renunciaré a mi mensaje».
Que Allah haga de nosotros unos malos, muy malos ciudadanos unidos al Haqq (derecho islámico), al bien, y no desperdiciar nuestra energía en vanas esperanzas estériles.
Conclusión:
Lo inquietante de toda esta “campaña” no es que incite a los musulmanes a que no voten, sino sus llamamientos en contra del sistema democrático, la resistencia y la “abstención activa”.